No Cuentes los Días, Haz que los Días Cuenten

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miércoles, 1 de julio de 2015

ABRAZOS



He tardado un poco más de lo que me gustaría en volver a poner letras a este fondo blanco.  He estado poniendo toda la carne en el asador aprovechando una ventanita para la recuperación de fuerzas con las que me he encontrado después de la última sesión de quimioterapia. Y como sabréis hay que aprovechar las oportunidades, dar un empujón a la puerta y entrar con toda la intención de dar lo mejor de nosotros mismos. Para jugar a medias mejor lo dejamos.
Es así qué, esa ventanita la he estado empleando en escribir un artículo en inglés y castellano que pronto verá luz sobre qué hago a nivel físico y otro a nivel mental para intentar atenuar esta enfermedad y aplicarlo a mi día a día. No podré correr pero no paro



 Y de hecho me ha venido estupendamente, junto con la ingestión de más fruta, miel, polen y aloevera. ¡Somos lo que comemos! Hay que comer comida sin procesar, lo más fresca y natural posible para que no ingerir nada externo al propio alimento, la carne es carne nada de conservantes ni E-51 Así entro en el hospital con la mirada alta, paso firme y contento, no miro las bolsas de Ifosfamida o Mesna como las causantes de mi malestar si no que lo hago como si me insuflarán el Maná y cuanto más carga mejor. Caña, Caña y Caña!!!
Pues bien, siguiendo este hilo, os cuento que desde el Lunes estoy en hospital para  un ciclo largo que previsiblemente durará hasta el Sábado. Os explico un poco cómo es:

A las 9 de la mañana espero en una gran sala hasta arriba de pacientes con diversas afecciones, entre los que nos encontramos diseminados por las pocas sillas libres o de pies los que tenemos un alien dentro. Somos los únicos con máscarilla, nuestras mermadas defensas (y eso que cuando vamos a por una sesión estamos en lo más alto de inmunidad y fuerza para aguantar bien la quimio)  no nos permiten coger ni un catarrillo. Una vez extraída la sangre por medio del PICC, que es una especie de grifo enganchado a un catéter de silicona que mantengo introducido en mi vena basílica del biceps derecho hasta que termine el tratamiento, y que va a parar a la vena cava de gran caudal pudiendo así difuminar el Oro Líquido de manera más efectiva por mi cuerpo cuando me introducen los productos de la quimio o en este caso sacar sangre sin tener que perforar cada vez que voy una vena.
Si el análisis da luz verde, a las 18h estoy entrando por la 4ª Planta del Hospital con la mochila llena de fueza y esperanza, arropado siempre por mis padres y por Ana. Y es nada más llegar cuando se suceden los " Hombre, Pablo! qué tal! qué bien veros por aqui", los besos y los abrazos que se detienen en el tiempo llenos de cariño, parabienes y las bromas por parte del Fantástico Equipo de Enfermer@s, que desde el primer día realizan un grandísimo trabajo de mucha responsabilidad a la hora de seguir nuestro proceso en las sesiones,
El primer día que llego a parte de arremangarme el pijama por la caló, me pesan para controlar las cantidades a suministrar y en seguida suero al canto para mantener todo el organismo bien hidratado y las funciones de riñón por ejemplo a punto y poder eliminar más fácilmente los restos del tratamiento.
Al día siguiente y hasta finalizar la sesión el sábado, sobre las 8-9h (dependiendo de la prisa que se den en Dep. de Farmacia) empiezan a suministrarme más protección para riñones y vejiga y acto seguido productos químicos como la Ifosfamida, que como se ve en la foto de abajo, va tapada por ser fotosensible. Todo ello va conectado a una bomba de infusión que controla las horas de los ciclos y velocidad de goteo

 Evidentemente parte de todo este líquido que me meten tengo que ir soltándolo poco a poco por lo que mis paseos al baño son continuos y acompañados siempre por la bomba. Pero no todo el líquido es excretado asi es que a parte por  la acción de los Corticoides mi cuerpo se hincha como muñeco de michelín hasta que elimino todo. De ahí la importancia de que las funciones hepáticas y de los riñones vayan como un reloj. Todo ésto dura desde primera hora de la mañana hasta las 23h aprox en que me vuelven a poner el suero para seguir con la hidratación. A veces tengo aturdida la cabeza o estoy somnoliento y sobretodo hinchado como si viniera de una boda en Bilbao ;-) suelo tener mucha hambre pero si se da el caso de estar tan hinchado por el tratamiento que me dan naúseas, me obligo un poco a comer, hay que estar bien alimentado para que no decaigan las fuerzas.

                                                             Mis bocatas de quimio

Como veréis el trabajo del Equipo de Enfermería y Celadores es crucial para que toda la sesión esté en sincronía con los tipos de productos químicos, cantidades y tiempo. Si no fuera por cómo realizan su estupendo trabajo y el buen ambiente que generan de manera espontánea, es decir que les sale desde su propio corazón, la estancia en la planta sería melancólica, y gris y muy difícil de superar día tras día para volver a las pocas semanas a por más quimio y más tristeza.
Una vez terminada la estancia y todavía sin sentir de lleno los efectos secundarios de los tóxicos metidos por el brazo durante horas, llega la hora de despedirse. Un momento inexplicable, lleno de ternura y emoción. Ya que estás pasando por los momentos más delicados de tu Vida y sentir el afecto de manera tan personal por áquellos que te cuidan es impagable, una auténtica lección de honorabilidad y afecto totalmente desinteresado. Cualquiera que esté pasando o haya pasado lamentablemente por situaciones similares sabe de lo que hablo y de lo que se aprecia cualquier gesto cariño.
Por tanto, quisiera desde aquí agradecer eternamente las continuas muestras de afecto, y emanación de buena energía por parte de mi Equipo Médico y sobretodo a TODOS los enfermeros y enfermeras de la Planta de Oncología del Hospital Universitario de Salamanca que desde el minuto uno han estado brindándonos todo el apoyo e información del mundo. Gracias!

Un beso especial para Chus, Javier  y resto del Equipo

.....Y en el apartado de Humor Cancerígeno hoy tenemos la foto de mi casting para entrar en los X-Men. Verás tú cuando me pongan radioterapia :-)





Nos vemos por aqui.... Seguiremos en lucha y con el hacha de guerra desenterrada!!